El cómputo en la nube como una palanca para el desarrollo de las Instituciones de Educación Superior

Beneficios

Las IES al ser una semilla de nuevos profesionistas, tienen la obligación de encaminar esfuerzos y explorar la implementación de nuevas tecnologías. Con base en esto, no solo los estudiantes de las universidades se verán beneficiados, sino también los ciudadanos en general que desean tener acceso al conocimiento y a la educación superior. A continuación, se muestran algunos de los beneficios del cómputo en la nube en las IES.

Reducción de costo en compra de libros y material didáctico

Actualmente, miles de libros aún son comprados por las universidades, representando un porcentaje alto del presupuesto. Sin embargo, muchos de estos libros contienen temas que ya no son actuales, ya que la tecnología avanza a pasos muy acelerados. El uso de bibliotecas digitales ofrece a los alumnos, profesores e investigadores consultar información, así como subir nuevos estudios y compartirlas con la comunidad universitaria, esta acción trae consigo un gran beneficio para que mucha gente pueda enterarse y acceder a nuevos estudios. Además, los recursos dentro de la nube se pueden actualizar fácilmente para que los estudiantes tengan la información más novedosa a un clic de distancia.

Integración de equipos y colaboración

Un modelo de nube en las universidades ofrece una integración entre los diferentes departamentos, campus y escuelas, lo que facilita el intercambio de información y recursos de cómputo tanto a los estudiantes como a los profesores, independientemente de dónde se encuentren. Por un lado, los estudiantes tienen la oportunidad de colaborar con otras universidades nacionales o extranjeras sin la necesidad de trasladarse largas distancias mediante aplicaciones de aulas virtuales. Por otro lado, ofrece a los estudiantes que no viven en las grandes capitales, donde suelen estar las mejores universidades, obtener un título y acceder a una educación desde su lugar de origen sin la necesidad de trasladarse y pagar rentas costosas. Esto último, da pie a aumentar la plantilla estudiantil, ya que puede beneficiar a miles de estudiantes que no pueden entrar a las universidades por un límite de cupo y de esta forma fomentar el desarrollo humano con el propósito de dar bienestar a la ciudadanía.

Integración de los sistemas administrativos

La pandemia de COVID-19 ha detenido (octubre 2021, fecha de elaboración del texto) muchos procesos administrativos en las universidades debido a que muchos de sus sistemas siguen trabajando bajo el paradigma tradicional, es decir, los datos de los alumnos y profesores se obtienen a nivel local, por lo que al estar cerradas las universidades provocaron retrasos en pagos, en altas, en bajas de trámites y retrasos en titulaciones, que han afectado a muchos estudiantes. Por lo que un sistema en la nube bajo el modelo de nube privada, en la que los interesados se conecten mediante un sistema de varios pasos de autenticación, permitiría seguir trabajando sin ningún retraso administrativo.

Integración y desarrollo educacional

El modelo SaaS más allá de ser ampliamente usado por los estudiantes en aplicaciones como Facebook, Youtube y Google-drive, permite a las mismas universidades desarrollar sus interfaces donde se tengan espacios de almacenamiento para subir sus tareas, y el mismo sistema pueda calificarlas bajo rúbricas preestablecidas. Más aún, un sistema como IaaS le permitiría tanto a los estudiantes como a los investigadores pedir recursos como máquinas virtuales para procesar sus modelos y obtener resultados sin la necesidad de tener que preocuparse por la administración de centros de datos o la instalación de actualizaciones. Esto ayudaría a cientos de estudiantes e investigadores a procesar su información, y tan pronto obtengan resultados, los recursos se liberan para ser usados por otros usuarios. Por ejemplo, el portal de estadísticas de la Universidad Nacional Autónoma de México refiere que se tienen 88,571 computadoras propiedad de la UNAM con acceso a Internet y con una capacidad de 291 mil millones de operaciones por segundo en estaciones de supercómputo [6].